Smog - Limpieza y Protección

Las sustancias aéreas a las que están expuestos los materiales y las condiciones climáticas actúan sobre los soportes modificando su composición; en este caso la degradación se llama degradación química. Los efectos más comunes del smog sobre los materiales son: formación de costras negras, retroceso de la superficie (disolución química), cristalización de sales.

Sin embargo, el nivel de agresión y el mecanismo de alteración debido a los contaminantes varían dependiendo de la exposición del material, la naturaleza química del material y las condiciones ambientales externas.

La primera operación a realizar es limpiar completamente la superficie y eliminar las costras de smog. Para ello, CIR propone el uso de sistemas químicos compuestos por detergentes específicos, con PH variable, compatibles con la naturaleza química de los soportes y capaces de garantizar el respeto al material, al operador y al medio externo, gracias a los tensioactivos biodegradables contenidos en ellos.

Posteriormente será necesario proceder a una protección específica con efecto anti-smog: los particulares principios activos contenidos en las formulaciones estudiadas por el CIR permiten limitar significativamente la penetración de las partículas de smog, facilitando así la limpieza de las superficies.

Durante la fase de limpieza, es imprescindible mojar el soporte con agua antes de aplicar el detergente, para permitir que el producto actúe sobre la pátina de smog en el exterior del soporte, limitando su penetración en la porosidad del material.